Valle de lágrimas
Libro de la Vida Verdadera
Valle de lágrimas
Si he venido a vosotros es porque os amo. Si os hablo en apariencia con severidad, en mi palabra está mi justicia y mi amor. Si os hago conocer mi verdad, aunque ella a veces os cause dolor, es porque quiero vuestra salvación. 1-22-25
No rechacéis mi palabra, analizadla para que en su esencia encontréis la Doctrina capaz de obrar el milagro de transformar este Valle de lágrimas, hoy convertido en campo de sangrientas batallas entre hermanos, en un Valle de paz en donde sólo viva una familia: La humanidad, practicando las leyes justas, perfectas y amorosas que os he inspirado, porque en el cumplimiento de ellas hallaréis la felicidad. 1-22-26
¡Cuánto dolor agobia a la humanidad en esta Era! No bien nace un niño cuando ya comienza a apurar el cáliz de amargura por causa de sus hermanos. Unos pierden a la madre antes de sentir la primera caricia, otros ensordecen con el estruendo de la guerra, en lugar de oír el dulce arrullo maternal. 1-26-42
El paraíso de los primeros fue convertido en Valle de lágrimas y ahora sólo es un Valle de sangre. Por eso hoy que he venido a cumplir la promesa que hice a mis discípulos, despierto de su letargo a la humanidad, dándole mis enseñanzas de amor para salvarla y busco a los espíritus que tienen el destino de levantarse en este tiempo a testificar mi manifestación y mi palabra con sus obras. Cuando esos señalados por Mí, se encuentren reunidos en torno a mi Ley, la Tierra y los astros se conmoverán y en el cielo habrá señales, porque en ese instante mi voz será escuchada desde un confín hasta el otro de la Tierra y mi Espíritu Divino rodeado de los espíritus de los justos, de los profetas y de los mártires, juzgará al Mundo espiritual y material. Entonces alcanzará su plenitud el Tiempo del Espíritu Santo. 1-26-43
Tampoco existen lugares creados por vuestro Padre expresamente para la expiación de las faltas cometidas por mis hijos. Yo os digo, que no existe un mundo en donde no haya depositado mis maravillas y bendiciones. 2-36-52
¿No decís que este mundo en que habitáis es un Valle de lágrimas o sea un Valle de expiación? ¿Y quién lo hizo Valle de lágrimas, Dios o los hombres? Yo lo formé a imagen del Paraíso celestial, sembrándolo de maravillas y complacencias, pensando hasta en lo más pequeño para haceros felices, y sin embargo, dentro de un mundo formado así, para el bienestar y el adelanto, para el deleite y la elevación espiritual de la humanidad, los hombres sufren, lloran, se desesperan y se pierden. 2-36-53
Mas vuelvo a deciros que Yo no hice este mundo para el dolor de los hombres; los mundos son lo que sus moradores quieren que sean. Ved cuánto ha deformado la verdad el hombre con sus malas interpretaciones, cuán distinto ha interpretado el sentido figurado con el que se le ha revelado la vida espiritual. 2-36-54
Humanidad: ¡Cuánto habéis negado mi existencia y vuestros dones! En verdad os digo, que no pisáis sobre la roca firme sino sobre arena movediza, y ese camino no os llevará al fin para el que fuisteis creados. 2-43-58
Leed y aprended en el gran Libro de la Vida Verdadera que os he concedido y si cumplís con su enseñanza, contad con que llegaréis a mi Seno por ese camino, mas pensad que si no lo hacéis así, os alejaréis del Padre y vuestra restitución será muy grande. 2-43-59
Hombres y mujeres que vagáis sin consuelo, ¿por qué no os fortalecéis en Mí? No me llaméis Padre injusto si lloráis y padecéis en vuestro destierro, Yo os he anunciado antes de venir a la Tierra, que esta morada es un Valle de lágrimas, que no es un valle de paz y recompensa. La Tierra no es vuestra morada eterna. “Bienaventurados los que lloran porque ellos serán consolados”. 2-43-60
¡Oh, Valle de lágrimas y de sangre donde los hombres levantan su rostro para adorarse a sí mismos y luego con sus manos cavan su propia tumba! Vengo a libertarlos del pecado y de la muerte, porque ellos se han atado y esclavizado. De cierto os digo, que este mundo ya no le pertenece a esta humanidad, por eso a cada momento le rechaza. 2-51-70
Habéis sido confinados a la Tierra, a este planeta que siendo huerto maravilloso, donde el Creador se desbordó en bendiciones, el hombre vino a transformarlo en Valle de lágrimas, mas la humanidad llegará a comprender que por restitución se le ha dado venir al mundo en este tiempo para transformar este desierto de tristezas y dolor en un Edén de Luz, en una morada de fraternidad y paz, en donde se cumpla con mi precepto que os dice: “Amaos los unos a los otros”. 2-53-26
Una nueva vida espera a los hombres. No es que la Naturaleza se vaya a transformar; es que cuando la humanidad se espiritualice por medio de esta enseñanza, todo lo verá a través del amor, de la fe y de la caridad, o sea que el hombre verá la vida a través del espíritu. Si lo que os rodea lo miráis, sentís y juzgáis a través de una mente materializada y de un corazón egoísta, esta vida tendrá que pareceros un Valle de lágrimas, un mundo de pecados y a veces hasta un lugar de castigo. Vuestros ojos no descubrirán bellezas, el espíritu no encontrará sitio para él, ni sustento, ni aliciente; mas si dejáis elevar el espíritu y desde la altura miráis cuanto os rodea y os envuelve, tendréis que rendiros ante vuestro Padre y confesar que habéis sido sordos, ciegos e insensibles a su divina presencia, manifiesta en todo lo existente espiritual o material. 3-81-18
Entonces huirá de vosotros la amargura y conoceréis la dulzura que brota de todo lo creado, porque todo es fruto del Árbol Divino. 3-81-19
El dolor que hoy padece la humanidad es por haber hecho mal uso de su libre albedrío y por su desobediencia a mi Ley; sus últimos frutos serán tan amargos que los arrojará lejos de sí y eso le abrirá los ojos a la luz y el corazón al arrepentimiento. 3-81-20
El mundo se ha confundido tanto en sus ciencias, que hoy no puede por sí solo volver al principio de su camino de evolución, porque no sabría distinguir la verdad de la mentira, por carecer de fe, de amor, e ignorar la finalidad de su existencia; por eso he venido nuevamente al mundo. Bienaventurados los que me oigan, porque ellos me comprenderán, me seguirán y serán salvos. Yo les daré fuerza para restaurar todo lo que hayan profanado o destruido. 4-87-8
Pueblo, perseverad en mi Doctrina y de cierto os digo, que tres generaciones después de la vuestra, el espíritu de vuestros descendientes habrá logrado una grande espiritualidad. Buscad la verdadera elevación y después lo hará toda la humanidad, porque vuestro mundo no está condenado a ser eternamente un Valle de lágrimas, una Tierra de pecado, un infierno de lujuria y de guerra. El Día del Señor es ya con vosotros, mi espada de justicia tocará la perversidad. ¿Qué pasará si destruyo la mala simiente, el vicio y el orgullo, y en cambio ofrezco protección a la semilla de la paz, de la concordia, de la regeneración y de la verdadera fe en Mí? Tendrá que transformarse el mundo; el hombre se transformará una vez que su culto espiritual y su vida sean mejores. 4-87-9
Llegará el tiempo en que se levanten hombres que verdaderamente amen mi Ley, los que sabrán unir la ley espiritual con la del mundo, o sea el poder eterno con el poder temporal; mas no será para esclavizar a los espíritus como en tiempos pasados, sino para mostrarles el camino hacia la luz, que es la verdadera libertad del espíritu. Entonces volverá la moral al seno del hogar, habrá verdad en vuestras instituciones y espiritualidad en vuestras costumbres. Será el tiempo en que la Conciencia haga oír su voz y en que mis hijos se comuniquen de espíritu a Espíritu con mi Divinidad, en que las razas se fusionen y todo ello determine la desaparición de muchas diferencias y contiendas, porque, hasta ahora, a pesar de ser tan pequeño vuestro mundo, no habéis sabido vivir como una sola familia, no habéis podido rendirme un solo culto. La antigua Babel os condenó a esta división de pueblos y de razas, mas la construcción de mi Templo espiritual en el corazón de la humanidad, os librará de esa restitución y os llevará a Amaros verdaderamente los unos a los otros. 4-87-10