Enseñanza 338
1. Yo soy el Camino y la Luz que os va guiando. Soy el Báculo que os sostiene y evita las caídas en vuestro camino. Soy el Faro que ilumina vuestro sendero, fortaleciendo a vuestro espíritu con la paz de mi Espíritu Divino, aquietando las tempestades de vuestra vida para que estéis a salvo, para que no se detenga vuestro espíritu.
2. En mi palabra recibís la fortaleza, el calor y el sustento que vuestro espíritu necesita, para elevarse y luchar como el Maestro le ha enseñado.
3. Mi palabra ha servido, sirve y servirá a través de los siglos, de crisol para obtener la limpieza del espíritu y para su perfeccionamiento. Vuestro espíritu ha pasado por distintas etapas de evolución, mas no ha alcanzado aún el perfeccionamiento dentro de sus obras, en el cumplimiento de su misión. Leer Más