Décimotercer Precepto
Tercer Libro
Los Veintidós Preceptos
Precepto 13
No tratarás mal ni con rigor a los pobres, sean los que fueren.
Quien oprime al débil, ultraja a su Hacedor; mas el que se apiada del pobre, le da gloria. Proverbio 14:31
No os engrandezcáis ante vuestros hermanos, sed humildes y mostradles buenos ejemplos. 12-343-3
¡Qué emoción tan grata sentís cuando miráis que un hombre notable entre los hombres, os hace una manifestación de afecto, de comprensión, de humildad! Esa misma sensación, la podéis llevar a los que sean o se sientan inferiores a vosotros. Sabed descender, sabed tender la mano sin sentir superioridad, sabed ser comprensivos. Os digo, que en estos casos, no sólo goza el que recibe la prueba de afecto, la ayuda o el consuelo, sino también el que la da, porque sabe que sobre él, hay Uno que le ha dado pruebas de amor y de humildad: Su Dios y Señor. 4-101-62
Sed humildes entre los más humildes, sed siervos de todos como Yo soy vuestro Siervo; he recibido muchas veces vuestras órdenes y os he obedecido para enseñaros. No desciende el que sirve sino que se dignifica. Y a cambio de vuestro servicio no pidáis pago alguno. No hay en la Tierra quien pueda apreciar vuestro trabajo. Yo os daré con justicia según vuestros merecimientos. 8-234-59
Levantad al caído. Yo a todos entrego mi caridad; mas los unos son azotados por las tentaciones del mundo y no han oído aún el llamado de su Conciencia. A vosotros toca tenderles la mano y ser un báculo para ellos en el sendero, hasta que logréis que caminen tras de mi huella de amor. 7-199-23
Si os sentís fuertes y veis que a vuestro lado caminan con dificultad vuestros hermanos no os sintáis superiores, porque caeríais en la grave falta de la vanidad y seríais semejantes al gusano que se hincha con la humedad de la tierra. En mi nuevo pueblo no se levantarán reyes ni señores. Toda mala simiente será apartada de vuestro corazón para que podáis ser mis profetas. 3-67-14
Mi paz sea con vosotros.